El capítulo de La ley y el orden que está inspirado en un caso real
Si hay una serie que ha logrado perdurar en el tiempo sin perder a sus espectadores, es sin lugar a dudas, La ley y el orden. La misma fue creada por Dick Wolf y se estrenó por primera vez en 1990 y hasta el día de hoy continúa emitiendo nuevos episodios. Ha sido tanto el éxito que ha cosechado con los años, que dio pie a crear otras ficciones derivadas, entre ellas, La ley y el orden: Special Victims Unit.
Esta ficción tuvo su estreno en 1999 y contó con el protagonismo de Mariska Hargitay como la detective Olivia Benson. Y junto a ella se lucieron una serie de actores como Christopher Meloni, Ice-T, Richard Belzer, Dann Florek, entre otros. Al igual que su predecesora, esta ficción se encargaba de abordar diferentes crímenes.
Una gran mayoría de los sucesos que ocurren en pantalla están basados en hechos reales, y el día de hoy te contamos sobre un episodio en particular que se encargó de representar un terrible hecho que sacudió Florida en 2008: el asesinato de Caylee Anthony.
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El mismo fue retratado en el episodio 19 de la décima temporada de La ley y el orden: Special Victims Unit. Bajo el título Egoísmo, el episodio se estrenó en 2009 y contó con la participación especial de Hilary Duff, quien se coloca en el rol de una madre joven e inmadura que se convierte en la principal sospechosa de la desaparición y muerte de su hija pequeña.
El verdadero caso de Caylee Anthony
Si bien el episodio de La ley y el orden se basa en hechos reales, lo cierto es que los acontecimientos que ocurren en la ficción terminan siendo algo diferentes a lo que verdaderamente pasó, que es mucho más escalofriante y cuya resolución causó mucha indignación entre el público y los involucrados.
Caylee Anthony era una niña de dos años que vivía en Florida junto a su madre Casey y sus abuelos, George y Cindy. Un día, Casey se marchó de su casa con la niña y por mucho tiempo se mantuvo alejada de su familia hasta que finalmente la abuela de la niña reportó la desaparición de su nieta, pues llevaba tiempo sin poder verla y su hija no le proporcionaba información certera de dónde estaba. A su vez, George fue notificado de que el auto de su hija estaba en un estacionamiento y cuando fue a recogerlo, descubrió un fuerte olor a cadáver.
Esto dio inicio a una investigación donde Casey brindó información falsa a la policía.En un principio, la joven madre manifestó que su hija había sido secuestrada por su niñera y que no había acudido a la policía por miedo. No solo se descubrió que la niña no tenía niñera, sino que al poco tiempo se descubrieron restos óseos en un bosque cerca de la casa de la familia y se confirmó que los mismos correspondían a Caylee Anthony.
Casey fue arrestada y rápidamente comenzó un juicio, pues se le acusaba de haber asesinado a su hija deliberadamente, proporcionándole cloroformo y tapándole la boca con cinta adhesiva. Sin embargo, las evidencias nunca llegaron a ser del todo concluyentes y la defensa de la joven madre terminó convenciendo al jurado de que era inocente.
De esta manera, Casey Anthony fue declarada inocente y solamente fue sentenciada a un par de años en prisión por delitos menores como mentir a la policía o proporcionar información y pistas falsas. Esto generó muchísimo repudio entre la prensa y aquellos que seguían el caso, y la familia Anthony fue duramente criticada durante un buen tiempo, pues todas sus declaraciones y versiones del caso eran muy diferentes.
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