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Keira Knightley confesó que no está a favor de la icónica escena de esta película romántica

Keira Knightley rememoró un momento de Love Actually que, aunque se ha convertido en un ícono romántico, le resultó inquietante en su momento y lo sigue siendo hasta ahora.
La actriz británica no es fan de esta escena y explica por qué
La actriz británica no es fan de esta escena y explica por qué Foto: shutterstock

"Recuerdo que tenía un aspecto ligeramente de acosador. Es que es bastante terrorífico". Con estas palabras, Keira Knightley rompió el hechizo de lo que muchos consideraron una de las escenas más románticas de Love Actually. Años después de su estreno, la actriz reveló una incomodidad que para ella, en 2003, ya estaba presente en la famosa secuencia de los carteles. La película sigue siendo un clásico navideño y romántico, pero el paso del tiempo ha obligado a revisar sus escenas bajo una nueva luz, y esta, en particular, ha dejado de ser vista como un gesto amoroso para convertirse en un momento inquietante.

La escena que da origen a las palabras de Knightley es ahora parte de la memoria colectiva del cine romántico. Mark (Andrew Lincoln) llega a la puerta de la casa de Juliet (Keira Knightley) con una serie de carteles, cada uno con una declaración de amor: "Déjame decirte, sin ninguna esperanza ni agenda, solo porque es Navidad (y en Navidad se dice la verdad) que para mí eres perfecta". Mientras los carteles se despliegan, la música y el ambiente de la escena dan un tono nostálgico y emotivo, pero el contexto se vuelve perturbador cuando recordamos que el marido de Juliet, amigo cercano de Mark, está dentro de la casa.

La escena ha sido homenajeada y parodiada por años. Foto: Universal Pictures

“Recuerdo que Richard, que ahora es un amigo muy querido, filmando la escena, me decía: 'No, estás mirando como si fuera espeluznante'. Pero yo le contestaba: 'Es que es bastante terrorífico'”, contó Keira en una entrevista para Los Angeles Times. La actriz, que en ese momento tenía solo 17 años, no sentía que la escena fuera la representación perfecta de un amor idealizado. Al contrario, para ella era algo incómodo y cargado de una tensión extraña, casi como si estuviera invadiendo su espacio personal. "Había un factor espeluznante en ese momento, terrorífico, ¿verdad? Además, yo tenía solo 17 años", recordó.

A pesar de las instrucciones del director, quien le pedía que aligerara su expresión, Keira no pudo evitar mostrar lo que sentía. "Tuvimos que rehacer la escena para arreglar mi cara y que no pareciera tan espantada", reveló con sinceridad.

En la película, el personaje de Knightley está casada con otro hombre. Foto: Universal Pictures

Para ella, la escena no solo era incómoda por su contexto, sino también por su dinámica de poder. La tensión aumentaba al recordar que su personaje estaba siendo observado mientras vivía una situación que involucraba la traición implícita a su pareja, lo que hacía aún más difícil comprender cómo una invasión al espacio personal de una mujer podía ser vista como una expresión de cariño. “Recuerdo que estaba un poco incómoda pero me dijeron que era una escena de amor, así que traté de seguir el guion, aunque no me sentía cómoda con eso”, explicó. 

Con el tiempo, la escena de los carteles pasó de ser una de las más queridas de Love Actually a una de las más cuestionadas. En una reciente entrevista, el propio Richard Curtis, al recordar la escena, admitió: “No pensábamos que fuera una escena de acosadores. Pero si es interesante o divertida por razones diferentes [ahora] entonces, ya sabes, Dios bendiga nuestro mundo progresista”.

Mientras para muchos la escena sigue siendo parte del encanto de Love Actually, para Keira Knightley permanece como un recuerdo incómodo de su juventud.