Una comedia romántica de George Clooney esconde un vergonzoso secreto para el actor

Una comedia romántica de George Clooney esconde un vergonzoso secreto para el actor

George Clooney y Michelle Pfeiffer fueron entrevistados para celebrar el aniversario de una clásica comedia romántica, entre las anécdotas que contaron, surgió una que George quiere olvidar por completo.

Redacción QueVer

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En 1996 se estrenó la comedia romántica Un día muy especial” (One fine day), protagonizada por George Clooney y Michelle Pfeiffer. Esta película seguía a un padre y una madre solteros en un frenético día en la Ciudad de Nueva York mientras tienen que resolver un duro día laboral y al mismo tiempo cuidar a sus hijos.

La química de Clooney y Pfeiffer fue lo que más se destacó del filme, de hecho es lo que mejor recuerda el público, ya que la historia no se destacó por ser trillada.

A 25 años del estreno de este filme, la revista Variety entrevistó a Michelle Pfeiffer y George Clooney. Las estrellas repasaron toda la historia del filme y recordaron un momento que Clooney quisiera olvidar por completo.

Según cuentan en la entrevista, el actor y director, mientras se encontraba filmando “Un día muy especial”, aprovechó una noche para salir por la ciudad de Nueva York con su amigo Rande Gerber, hasta ahí la situación venía bien, pero George y su amigo se pasaron de copas.

El actor llegó muy tarde a descansar y al poco tiempo tuvo que despertar para ir al set de filmación. George se presentó en un terrible estado de ebriedad, aún con resaca. Pfeiffer cuenta que se percató de inmediato y agregó que “olía a destilería”.

“Estaba en Nueva York, me hospedaba en el hotel Morgans y mi amigo Rande Gerber, quien ahora es mi socio en la compañía de tequila, se unió a mi día libre. Así que tomé unos tragos. Nos quedamos despiertos y tomamos unos vodkas o algo así. Luego llegué a casa a la 1 de la mañana y dije: "Oh, mierda". Estaba bastante golpeado. Me desperté a las 5 de la mañana. Yo estaba como, "Me siento bien". Luego me miré al espejo y pensé: "Oh, todavía estoy borracho". Llegué al plató, caminamos hacia el tráiler y me senté y tú me miraste (Pfeiffer). Tu dices, "¿Qué?" Y yo estaba como, "No sabía que íbamos a trabajar hoy". Y dices: "Todavía estás borracho". Es una escena que hicimos en un episodio en el que tú y yo estamos hablando entre nosotros” contó entre risas y vergüenza George.

Michelle no se enfadó para nada con su compañero, de hecho fue empática y lo apoyó para que las escenas terminaran lo más rápido posible así podía ir a descansar y curar esa borrachera.

La charla siguió hasta tocaron el tema de darle una secuela a esta película y Michelle sugirió que de ser así, la continuación debería llamarse "Estoy cansada hoy".

 

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